Haiku

Escribí este cuento el 11 de abril de 2010 —al menos es la fecha al final del archivo original. Había estado leyendo la Historia de Genji traducida la español, donde los personajes intercambiaban a menudo pequeños mensajitos con expresiones muy curiosas, como “mangas húmedas” para indicar que habían estado llorando. En ese espíritu, decidí escribir un cuento que usaba haikus, pero también, por primera vez, darle un toque personal.

El haiku es un poema japonés de 17 sílabas (que pueden estar organizadas en versos de cinco, siete y cinco sílabas) que describe con sencillez –no necesariamente simpleza– algo cotidiano o natural. Con pocas palabras manifiesta la profundidad de algo aparentemente trivial… en general, las estaciones.


—En luz helada, /en silencio y vacío, /un grillo canta —observó el espíritu poeta con un dejo de melancolía.

—Tenés razón —aprobó su compañero sin mucha preocupación—. La única alma que percibo en esa casa es la de él, y se hunde en desesperación.

Evaluó la situación con frialdad intelectual, oyendo el canto del grillo que retumbaba en la soledad del hombre.

—Mueren sus ojos /en la total ausencia /de vida humana —dijo luego el poeta, y su compañero asintió.

—Pero supongo que si prende las luces va a notar todo vacío, todo artificial y opuesto a lo que está sintiendo, ¿no?

—Porta consigo /incontrolablemente /mangas húmedas.

—¿Te parece? —dijo el otro con un dejo de duda—. Yo no veo que esté llorando, pero si vos lo decís, así debe ser. Está solo, y está frustrado: lo comprendo.

—Brilla el fuego /tan solitariamente /cerca del agua —suspiró el poeta. Hubo una pausa pesada antes de la respuesta, en la que el otro espíritu hizo el equivalente a fruncir el ceño, morderse el labio y rascarse la cabeza.

—Ahí no caigo —exclamó finalmente, y continuó con la voz cargada de admiración—. Vos siempre ves más allá… ¿decís que ella lo dejó porque eran incompatibles? ¿O hablás de la pava?

El poeta hizo el equivalente a sacudir la cabeza, descubriendo como siempre que su colega espíritu era un caso perdido. Hablaba descontroladamente, con ese voseo insoportable, veía tanto como un humano normal y hacía de cuenta que estaban manteniendo una conversación. ¿No lo decía todo él con sus haiku, acaso?

—Las flores caen /se desnuda la tierra: /ya es invierno —dijo al final.

—Ella, que es toda su vida y su belleza, falta —asintió el otro—. Él queda solo y frío como tierra yerma y… pará.

Pararon. Todo se detuvo. Su campo de visión se desvió unos metros.

—Ahí volvió. Mirala, ¡entró nomás! Está prendiendo la luz.

—Che, amor, se cortó la luz, ¿querés que vayamos al patio? —gritó a toda potencia la mujer, que traía una bolsa en la mano.

—Dale —respondió el hombre desde el oscuro fondo de la casa.

Ella barrió la cocina con la mirada, y mientras volcaba el contenido de la bolsa (facturas y criollos) en una panera su mirada encontró la pava sobre el fuego. Frunció el entrecejo y exclamó con fingida indignación:

—¿Qué significa esto? ¿No está listo el mate?

El hombre apareció mirándose la mano, y extendió su brazo para que ella también la mirara.

—Me quemé —explicó—: se me volcó la pava encima, y hace un rato puse más agua a calentar.

Ella observó la manga del buzo, húmeda, cubriendo la muñeca enrojecida, y la besó delicadamente. Lo miró a la cara con ternura y le puso una medialuna en la boca. El poeta observó la escena atónito, abrumado. Sentía la sonrisa del hombre, sentía lo que pasaba en su interior, tal como lo había sentido antes.

—Las nubes huyen /dando paso en el cielo /a media luna —entonó con admiración, enternecido por el efecto de la llegada de la mujer.

—Me encandila su alegría —dijo su compañero, casi con asco—. Dejémoslos solos, que ya entre ellos se hacen suficiente compañía.

Y el poeta tuvo que asentir (inconscientemente, ensimismado), y seguirlo, sin palabras.

Esta es también la primera historia que escribí en la que mis personajes tomaban mate 🧉.

Mariana Montes
Mariana Montes
Doctoranda en Lingüística

Mis intereses de investigación incluyen semántica cognitiva y de corpus y visualización de datos.

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